Las razones del corazón, Primo Levi

No he abrazado a autores porque tuvieran ciertas virtudes o congenialidades; los he hallado por obra de la fortuna, y sus virtudes han aparecido entonces. El lector intermitente y errático, el lect…

Origen: Las razones del corazón, Primo Levi – Calle del Orco

Esta entrada fue publicada en El oficio de lector y etiquetada . Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario