
La escritora Marguerite Duras en 1983.
‘Las crónicas del dolor’ de la estadounidense Melanie Thernstrom se une a los textos de Duras, Argullol, Junger, Kipling, Nabokov y otros exploradores que abordaron la misión casi imposible de hacer literatura de un cuerpo que sufre, de escribir sobre una emoción que, en realidad, no se puede explicar, sólo padecer