Leer literatura, filosofía y ciencia, si no se hace por trabajo, es un lujo, una pasión noble o ligeramente perversa, un vicio que la sociedad no censura. Es tanto un placer como un propósito de mejora. Requiere cierto grado y capacidad de introversión y concentración. Es una forma de salirse de uno mismo y del ambiente que nos rodea, pero también es un medio para conocerse mejor, para ser conscientes de nuestro orden y desorden mental.
Alfonso Berardinelli. Leer es un riesgo.