Cuando Cheever termina una novela

Cuando acabas un libro, cualquiera sea su recepción, existe un cierto desplazamiento de la imaginación. No diría un trastorno. Pero terminar una novela, asumir que es algo que quisiste hacer y que te has tomado con mucha seriedad, es inevitablemente un shock psicológico.[…] Para apaciguar ese shock saco el dado más alto, preparo salsa, voy a Egipto, corto el césped, fornico. Me zambullo en una piscina fría.

John CheeverJohn Cheever

Esta entrada fue publicada en El oficio de creador y etiquetada . Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario